l´Illa de Benidorm

Cuenta la leyenda que el Gigante Roldán rompió la cima del Puig Campana con su espada y que, la isla de Benidorm es el trozo arrancado a esa montaña.

La presencia humana en l´Illa, como la llaman los benidormenses, se remonta al Neolítico, hace unos 7.000 años. Entre los siglos XV y XVII fue refugio de piratas berberiscos que la utilizaban como escondite y refugio desde donde atacar las poblaciones de la costa.

Además de su importancia estratégica, l´Illa ha sido importante por su importancia económica, pues su riqueza pesquera a beneficiado tanto a La Vila Joiosa como a Benidorm durante mucho tiempo.

L´Illa cuenta con dos faros, uno más antiguo, fuera de servicio, y otro construído en la segunda mitad del siglo XX.

En sus acantilados podemos encontrar plantas que se adaptan a la escasez de suelo y la influencia marina como el hinojjo marino (Crithmum maritimum), asteriso marítimo (Asteriscus maritimus) y una especie endémica que sólo se encuentra en la ComunitatValenciana y zonas colindantes, Sarcocapnos saetabensis.

En l´Illa podemos encontrar una de las colonias de cría de paíño europeo o "escateret" (Hydrobates pelagicus melitensis) más importantes del Mediterráneo. Es un ave pequeña, que se alimenta en alta mar y que sólo llega a la isla por la noche.

Dos especies de gaviota pueden verse en l´Illa: la gaviota patiamarilla (Larus cachinnans), muy común y la gaviota de Audouin (Larus audouinii), una especie amenazada de extinción.

En el mar, según la época del año, pueden observarse fácilmente delfines, cormoranes y peces voladores.

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