Benidorm se suma al primer Día Europeo sin víctimas en las carreteras
El Ayuntamiento de Benidorm se ha sumado al primer Día Europeo sin víctimas de tráfico, que se celebra este 21 de septiembre coincidiendo con la Semana Europea de la Movilidad. Este día, conocido como Proyecto Edward –por el acrónimo inglés de European Day Without A Road Death-, está impulsado por la Red Europea de la Policía, la TISPOL, y nace para hacer reflexionar a los usuarios de la carretera sobre sus actitudes y comportamientos y las consecuencias que éstos pueden tener.
El alcalde, Toni Pérez, ya trasladó el pasado mes de julio a la Dirección General de Tráfico (DGT) su apoyo a las iniciativas vinculadas al Proyecto Edward. Este apoyo se ha hecho explícito estos días con la firma del compromiso lanzado por TISPOL.
Pérez ha señalado que “el grado de exigencia y responsabilidad del Ayuntamiento en materia de seguridad vial ha aumentado considerablemente a lo largo de los últimos años”, adoptando medidas “encaminadas a hacer que circular por nuestras calles sea cada vez más seguro y se reduzcan los accidentes y la gravedad de los mismos”.
El alcalde ha remarcado que “aunque la seguridad vial haya mejorado, no hay que bajar la guardia”, y ha añadido que “tenemos que seguir trabajando para que las cifras de siniestralidad desciendan, para que los heridos se reduzcan a la mínima expresión, y para alcanzar y mantener el objetivo de 0 víctimas mortales” que establece el Proyecto Edward.
Para lograr esa mejora de la seguridad vial y esa reducción de la siniestralidad, desde el área de Movilidad se ha impulsado la progresiva implantación de cámaras de vigilancia de tráfico que “permiten detectar posibles incidencias”; al tiempo que se ha realizado obras en la vía pública para mejorar la seguridad para conductores y peatones en cruces, intersecciones o calles en las que en los últimos años se habían producido más siniestros -como por ejemplo en la parte alta del Rincón de Loix-, eliminando así posibles puntos negros.
Además, se ha incremento de forma considerable el número de calles “en las que la velocidad máxima de circulación está limitada a 30 kilómetros por hora, e incluso a 20 kilómetros”.