Benidorm propone soterrar el trazado del Tren de la Costa durante 3 km. a su paso por la ciudad

El Ayuntamiento ha registrado las alegaciones al estudio trasladado por el Ministerio, dirigidas por el profesor Armando Ortuño de la UA
Se plantea un trazado en paralelo al TRAM, una estación intermodal y una ronda urbana sobre el tramo soterrado

El Ayuntamiento de Benidorm ha registrado hoy en la Subdelegación del Gobierno de Alicante sus alegaciones al estudio informativo sobre el Tren de la Costa trasladado por el Ministerio de Fomento, que concluía que ninguna de las cuatro fases de esta infraestructura era rentable financiera y socioeconómicamente. En rueda de prensa, el alcalde, Toni Pérez, ha informado del contenido de estas alegaciones junto a Armando Ortuño, doctor ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, quien ha dirigido el encargo que se hizo al Instituto de Investigaciones Turísticas de la Universidad de Alicante.

Pérez ha recordado que el Ayuntamiento disiente del análisis de la demanda de ese estudio, de la prioridad que se ha dado a cada una de las fases del proyecto, de la ausencia de la conexión con el aeropuerto de Alicante y de “las tres alternativas” de trazado propuestas para el tren a su paso por Benidorm.

De ahí que se haya propuesto “un trazado alternativo”, en el que se ha tenido en cuenta: “la oportunidad histórica de acabar con la barrera física que significa el TRAM”, “la minimización del impacto de la llegada de la alta velocidad en la zona de la Huerta”, el hacerlo “compatible con infraestructuras existentes o previstas como la variante de Altea o el acceso a la nueva zona industrial”, maximizar “la intermodalidad”, aproximar la estación “al casco urbano”, y “generar una ronda que mejore la conectividad urbana y comarcal”.

Para ello, el Ayuntamiento propone que el trazado de la alta velocidad discurra en paralelo al del TRAM y que a lo largo de 3,1 kilómetros –desde la avenida Juan Pablo II hasta el futuro vial de acceso al polígono industrial- ambos vayan soterrados en falso túnel. Sobre este falso túnel se quiere hacer un nuevo vial que absorba parte del tráfico urbano y comarcal de la N-332. Además, se plantea una estación intermodal junto a la terminal de autobuses, donde también se trasladaría la del TRAM.

Ortuño ha explicado que la alternativa propuesta incrementaría el coste del proyecto global en 40 millones de euros, si bien este incremento se compensaría en parte “con cambios en otros puntos del trazado” –como “la remodelación del área metropolitana de Alicante”-; también y con la posibilidad de firmar convenios de cofinanciación entre el Ministerio, la administración autonómica y la entidad local como se ha hecho en otras muchas ciudades en las que se ha implantado la alta velocidad.

Respecto a la demanda recogida en el estudio, ha asegurado que ésta “se ha subestimado para el tramo Alicante-Benidorm”, ya que superarían los dos millones de pasajeros en lugar de los 860.000 calculados. Ortuño ha recordado que además de los pasajeros que lleguen procedentes del centro de la Península hay que tener en cuenta los del aeropuerto –en continuo crecimiento-, y ha incidido en que es indispensable que la conexión con la terminal Alicante-Elche se incorpore al proyecto.

Tras señalar que “la estación de Alicante tiene más pasajeros en estos momentos con destino a Benidorm que a la capital”, Ortuño ha afirmado que “por demanda y eficiencia la primera fase” a ejecutar del Tren de la Costa “debería ser la de Alicante-Benidorm con el enlace al aeropuerto incluido”.

El alcalde y Ortuño han coincidido a la hora de asegurar que el Tren de la Costa es “un proyecto que va a marcar el futuro de Benidorm y de la comarca para las próximas décadas, probablemente para el próximo siglo”, por lo que “conviene que lo pensemos bien, que lo analicemos bien y que se defina un buen proyecto”.