La ciudad se encuentra por debajo de los parámetros de velocidad que marca la DGT en la inmensa mayoría de los puntos
Benidorm logra reducir en año y medio un 28% la velocidad media de los vehículos con la implantación de los controladores didácticos
Solo en Armada Española se supera la velocidad que impone la DGT, aunque en esta zona se actuará en septiembre con la creación de la Zona de Bajas Emisiones
La implantación de nueve controladores didácticos de velocidad en otros tantos puntos de Benidorm ha logrado que en poco más de año y medio se haya reducido sensiblemente la velocidad media de los vehículos que circulan por la ciudad.
En concreto, según las mediciones realizadas por la Concejalía de Movilidad, la velocidad del tráfico ha descendido en 11,2 kilómetros por hora de media en el cómputo de los puntos en los que se colocaron pantallas con emoticonos e indicadores de velocidad. Ello supone, en términos porcentuales, una reducción global del 28% de la velocidad de los vehículos desde el momento en que se instalaron dichos dispositivos hasta el actual.
Esta reducción de velocidad se ha logrado no solo por la instalación de los controladores sino por la aplicación de límites de velocidad en las principales vías que se encuentran incluso por debajo de los parámetros que marca la Dirección General de tráfico (DGT). En ese sentido, de los nueve puntos en los que existen controladores, sólo en uno de ellos, el situado en la avenida Armada Española, se supera de media el límite establecido por el Ayuntamiento y la DGT, que es de 20 km/h. Si en enero de 2021 la velocidad media era de 41 km/h en ese punto ahora es de 29.
Sobre este punto, el concejal de Movilidad, José Ramón González de Zárate, ha señalado que “hemos detectado que la media de velocidad es ligeramente superior a la marcada y por eso hemos decidido actuar en esa zona con una inversión muy importante como es la implantación de la Zona de Bajas Emisiones, que comenzaremos en septiembre”. Ello permitirá, ha explicado, “no solo reducir la velocidad, sino disminuir de manera significativa las emisiones de CO2 al medio ambiente”.
Los datos de la Concejalía de Movilidad señalan que en la avenida del Mediterráneo, donde la velocidad está limitada a 10 km/h, esta se ha reducido de 28 km/h en enero de 2021 a los 20 km/h en abril de ese año, cuando se instalaron los controladores. En julio de este año la velocidad media había descendido hasta los 16 km/h, aún por debajo de lo que establece la DGT para una vía de ese tipo.
En Severo Ochoa se ha pasado de los 32 km/h de media medidos en enero de 2021 a los 24 actuales. En esta vía la velocidad está limitada a 20 km/h, también por debajo de lo que dicta la DGT.
También en la avenida Comunidad Valenciana se ha detectado un descenso significativo de la velocidad al pasar de los 38 km/h medidos en enero del 21 a los 31 km/h de julio de este año. Aquí la velocidad permitida es de 30 km/h, mientras la DGT permite diez más para estas vías.
También es reseñable la situación que se da en otros dos puntos controlados por estos dispositivos. En la avenida Beniardá y en Alfonso Puchades los vehículos circulan a una media inferior a la establecida por el Ayuntamiento, que es de 30 km/h. Así, en la avenida Beniardá se ha pasado de 37 km/h a 27 y en Alfonso Puchades de 30 km/h a 25 este pasado mes de julio. En ambas vías la DGT permitiría circular hasta 40 km/h.
Otro de los puntos controlados, la avenida de Villajoyosa, limitada a 20 km/h, ha pasado de 41 km/h a principios de 2021 a los 29 km/h de media el pasado mes de julio, aún por debajo de lo que marcaría Tráfico para una carretera de estas características.
Lo mismo sucede en la avenida Juan Pablo II, en donde no se puede circular a más de 30 km/h. Si en enero de 2021 la velocidad media era de 56 km/h, ese dato se ha reducido ahora hasta los 35 km/h. En la avenida Vicente Pérez Devesa, con la misma limitación, también se registraba una velocidad media de 56 km/h en enero del año pasado, que se ha reducido hasta los 41 km/h de ahora.
Por último, la Concejalía ha decidido actuar también en la calle Nau Llondro, en el complejo escolar del Salt de l’Aigua, al haber detectado un aumento de la velocidad de los vehículos. Esta vía está limitada a 20 km/h, pero la velocidad media medida desde marzo hasta julio oscila entre los 31 y 34 km/h. “Hemos visto que se había producido un incremento de la velocidad en esta zona y por ese motivo se ha optado por colocar un nuevo controlador con indicador de velocidad y un emoticono para avisar a los conductores” ha detallado González de Zárate.
De igual modo, también se ha instalado otro dispositivo igual en la avenida Comunidad Europea que, como los ya existentes, tendrá la misma función de informar a los conductores sobre si circulan o no a una velocidad adecuada.