La ofrenda y la misa a la Mare de Déu marcaron el inicio de la celebración, que finalizó anoche con la cremà
La Festa de la Carxofa une la tradición y la devoción en el casco antiguo de Benidorm
Benidorm celebró ayer sábado una de sus fiestas más tradicionales, la Festa de la Carxofa, que tiene lugar cada tercer sábado del mes de noviembre, justo detrás de les Festes Majors Patronals. Esta fiesta, presidida este año por Lázaro Antón, se desarrolla casi en su totalidad en la Plaza de la Constitución.
A primera hora de la mañana tuvo lugar la ‘penjà’ de la carxofa, que dio paso a las 9,45 a un pasacalles hasta la iglesia de Sant Jaume en donde se realizó una ofrenda a la patrona de la ciudad. Al acto acudió el alcalde Toni Pérez, la concejal de Fiestas, Mariló Cebreros, miembros de la corporación, las reinas de les Festes Majors Patronals, Daniela Talavera y Angélica Morenilla, el presidente de la Comissió, Vicente Solaz, el de la Associació de Penyes, Ramón Cano, y la comisión de la Festa La Carxofa.
Tras la ofrenda se celebró una misa y al término de la misma se bajó en pasacalles hasta la Plaza de la Constitución en donde se ofreció una sardinada popular a las 12,30 horas para todos los asistentes. Por la tarde disputó una partida de pilota ‘a raspall’ a las 17,00 en la calle Santísima Trinidad y desde las 18 horas un DJ amenizó con música toda la tarde hasta que a las 21 horas comenzó el concurso de bebedores de cerveza.
El punto álgido llegó a las 23,30 cuando se inició la tradicional ‘cremà’ de la Carxofa, que ponía el punto final a la fiesta, en una Plaza de la Constitución a rebosar con cientos de vecinos y visitantes que no quisieron perderse el momento. La animación y la música siguieron, no obstante, hasta la madrugada.