El Museo Boca del Calvari expone las muestras de Isidro Blasco y Antje Wichtrey y suma ya 38 exposiciones

El Museo Boca del Calvari estrenó ayer dos nuevas exposiciones que podrán ser disfrutadas hasta el próximo 2 de marzo en el horario habitual de la instalación. Por un lado, la exposición de Isidro Blasco y su ‘Planets’, en la planta baja y en la -1, y por otro la muestra ‘Flotar’ de la alemana afincada en Granada Antje Wichtrey.

La concejal de Patrimonio Histórico y Cultural, Ana Pellicer, destacó en la inauguración que con estas dos muestras, el Museu suma ya 38 exposiciones. “Ambos artistas van a coincidir en este espacio expositivo con propuestas muy dispares en estilo, temáticas y materiales, lo que va a permitir al espectador disfrutar de dos conceptos y aproximaciones al arte diferentes pero igualmente enriquecedoras” señaló.

En cuanto a la obra de Isidro Blasco afirmó que utiliza “imágenes digitales y materiales de construcción para crear entornos arquitectónicos a gran y pequeña escala, produciendo instantáneas de paisajes urbanos que juegan con la percepción”. Y sobre la de Antje Wichtrey indicó que sus obras “están coloreadas en varias capas sutiles, en las que ha empleado la técnica del grabado en madera y dispuestas en papel japonés suspendido, que funcionan como ‘islas o tiras de color’ repartidas por la sala, trasladando esa idea de flotar también al soporte”.

Los dos artistas estaban presentes ayer en la inauguración de sus muestras. Blasco calificó de “increíble” tener una exposición en el Museu Boca del Calvari y dijo sentirse “fascinado con Benidorm desde pequeño y con la belleza de la ciudad”. El autor explicó que había hecho “una aproximación a esta ciudad igual que he hecho con otras como Nueva York, Shangai, etc.”

Por su parte, Agney Wichtrey recordó que “empecé con el cuadro expuesto en el cartel anunciador y luego llegó la pandemia. Con tanto tiempo libre hice unas 80 láminas, a pesar de que solo tenía pensadas unas diez. Otra idea que ha tratado de reflejar es “la idea de flotar en el material, y de ahí el uso papel japonés”. Cada lámina pesa 30 gramos y con la pintura alcanza los 60 gramos. “Quería transmitir la sensación de flotar también a través del material” añadió la artista.

El acto fue cerrado por el alcalde Toni Pérez quien aseveró que “Benidorm tiene muchas singularidades, entre ellas este museo” y recalcó el hecho de las 38 exposiciones “en muy poco tiempo”. “Este inmueble permite que el arte se acerque a las personas con sus puertas abiertas y que es muy accesible. Contribuye a que la gente se acerque al arte y eso es maravilloso” concluyó.