El alcalde ha destacado que la amapola es un símbolo “del recuerdo y de la esperanza en un futuro que deseamos en paz”
Benidorm conmemora un año más el ‘Poppy Appeal’ con un desfile de la Royal British Legion
Toni Pérez ha ensalzado el “soporte brindado” a sus compatriotas durante los meses de la pandemia
La Royal British Legion (RBL) ha organizado en Benidorm, un año más, el desfile de la ‘Poppy Appeal’, que ha tenido lugar a mediodía. La marcha ha partido desde la calle Castellón hasta el Rincón de Loix por el paseo de Levante al ritmo de las gaitas y tambores de la banda ‘Torrevieja Pipes and Drums’.
Toni Pérez, alcalde de Benidorm, ha participado en el acto, que ha sido presidido por las banderas de España, Reino Unido y los distritos de la RBL, portadas por los ‘Standards Bearers’. En la marcha también han intervenido los ‘Chelsea Pensioners’, soldados pensionistas del Hospital Real de Chelsea.
El acto oficial se ha desarrollado en la avenida Ametlla de Mar donde se han dado cita, además del alcalde, el vicepresidente nacional de la RBL, Joe Falzon; el agregado de Defensa de la Embajada Británica, el capitán Ian Clarke; la cónsul británica, Sara-Jane Morris; el ‘chairman district’ de la RBL, Donald Cubbon; el representante en el extranjero de la RBL, Bob Chambers y el miembro de la Oficina de Apoyo en el extranjero de la RBL, Fi Hedges..
El alcalde, en su intervención, ha expresado su “saludo y enhorabuena” en nombre de la ciudad a toda la Royal British Legion en la celebración del acto “de homenaje y de vuestro centenario”. La RBL nació en 1921 como entidad que vertebró otras asociaciones de veteranos, soldados licenciados y desmovilizados con el fin de promover la ayuda a quienes prestaron el servicio de armas a la patria y a sus familias y dependientes.
De hecho, el emblema de la amapola roja que preside el acto cada año es “un símbolo tanto del recuerdo como de la esperanza en un futuro que siempre deseamos en paz” ha dicho el alcalde. El icono de la amapola procede de la visión, tras la I Guerra Mundial, de los campos de Flandes donde perdieron la vida muchos soldados y en los que destacaban miles de amapolas en medio de grandes extensiones verdes.
La amapola, ha recordado Pérez, es ya un símbolo que cobra “un protagonismo especial” porque comprende “experiencias individuales vividas y exigencias personales” y cuyas celebraciones comienzan cada año a las 11 de la mañana del día 11 del mes 11 “en recuerdo del Armisticio que puso fin a la primera gran guerra”.
“Aquellas amapolas, creciendo a miles y miles, conformaron un inmenso tapiz de esperanza y se convirtieron en símbolo de la confianza en el mañana” ha afirmado el alcalde, que ha felicitado a la RBL por su labor “en esta tierra que os acoge y que también es la vuestra”.
Toni Pérez ha aludido asimismo a los meses de la pandemia para ensalzar el “soporte brindado a compatriotas” que residen en Benidorm tanto con contactos telefónicos, visitas o apoyos con los servicios sociales de las administraciones españolas “siempre cumpliendo la misión para la que os incorporasteis a The British Royal Legion”.
El primer edil ha finalizado su intervención dando ánimos “para seguir adelante cien años más y cuantos la sagrada misión del servicio a vuestros principios os demande”.
La RBL es una entidad sin ánimo de lucro que con la celebración de la ‘Poppy Appeal’ distribuye 25 millones de amapolas de tela, confeccionadas en su mayoría por personas con diversidad funcional, y cuyos beneficios en forma de donativos se destinan a la ayuda de exmilitares y sus familias como consecuencia de conflictos bélicos. Cuenta con más de 700.000 miembros en todo el mundo, de los que en España hay unos 4.000 y más de un millar en la provincia.