Benidorm aplaza la entrada en vigor de las restricciones de acceso de vehículos a la avenida del Mediterráneo

El Ayuntamiento de Benidorm ha ampliado el plazo para la entrada en vigor de las restricciones de acceso a la avenida del Mediterráneo desde la avenida Europa, una medida que entró en vigor ayer 31 de enero, según el decreto firmado por el concejal de Movilidad, José Ramón González de Zárate.

Esta medida no afecta, sin embargo, al resto de Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), cuyas restricciones se mantienen vigentes. En este caso, las restricciones de acceso a la avenida del Mediterráneo tendrán efecto “cuando se dispongan de los medios tecnológicos adecuados” ha detallado el edil.

De hecho, el decreto firmado ayer establece que la restricción de tráfico en la avenida del Mediterráneo “continuará teniendo un carácter meramente informativo” y, por tanto, “las cuestiones relativas a la normativa de tráfico, tales como prioridad peatonal, velocidades máximas, etc. se regirán por la señalización existente”.

La creación de las Zonas de Bajas Emisiones se implantó con el fin de restringir el acceso a los vehículos más contaminantes y favorecer un modelo de movilidad de bajas emisiones, así como continuar con el proceso progresivo de peatonalización y de restricción de acceso a determinadas zonas y calles. “Un proceso iniciado estos años que tenía como objetivo la devolución al peatón de un espacio que inicial e históricamente era suyo” ha indicado el concejal José Ramón González de Zárate.

El Ayuntamiento solicitó una subvención de 3.170.250 euros al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para acometer estas actuaciones. Así, la Zona de Bajas Emisiones se divide en tres subzonas, como son Levante, el centro urbano y Poniente. El objetivo, ha explicado el concejal era “reducir la intensidad de vehículos que circulan en esos tramos y mejorar las condiciones ambientales y peatonales”.

“Lo que hacemos es una ciudad amable, cómoda y dentro de los objetivos de sostenibilidad y que al mismo tiempo sea un modelo contra el cambio climático” ha agregado el edil.

El proyecto, diseñado para la obtención de la subvención, contempla entre otras actuaciones, “la creación de la ZBE de Benidorm, los elementos asociados a la implantación de la ZBE Benidorm, la adecuación e instrumentalización de aparcamientos disuasorios con guiado a plaza, la implantación de aparcamientos para bicicletas seguros con mejora de señalización mediante ‘metrobici’ o la gestión de las zonas de carga y descarga en la ZBE”, ha explicado González de Zárate.

También está prevista la adquisición de autobuses eléctricos, un sistema de recarga de bus eléctrico en el aparcamiento disuasorio de la Estación de Autobuses y la implantación de un sistema de pago abierto y multiplatafoma asociado para transporte público y aparcamiento disuasorio. Según el edil, “gracias a la política a favor de la movilidad activa y sostenible que llevamos realizando desde hace años, en Benidorm ya tenemos mucho terreno adelantado”. 

En el caso de los municipios de más de 50.000 habitantes, como Benidorm, la ley establece la obligación de establecer ZBE “no más tarde de 2023”. En ese sentido, el programa de ayudas a municipios para la implantación de ZBE, dotado con 1.000 millones de euros en dos anualidades, establece también la obligatoriedad de disponer de un Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), con el que Benidorm ya cuenta. El límite máximo de los costes subvencionables está fijado en el 90% de cada actuación.

Una vez presentadas las solicitudes, se está procediendo a la evaluación de las mismas, tras lo cual llegará la resolución provisional y el período de alegaciones. Tras la resolución definitiva, a lo largo de este invierno, se realizará el pago de los anticipos de las actuaciones.

Los requisitos de dichas actuaciones a ejecutar señalan que estas deben tener “un alto grado de madurez, estar finalizadas antes del 31 de diciembre de 2024, han de ayudar a reducir las emisiones contaminantes y deben impulsar la igualdad de género, la innovación, el cambio modal y la accesibilidad” ha finalizado González de Zárate.