La procesión marinera en honor a la Virgen del Carmen recorre la Bahía de Benidorm

La bahía de Benidorm se convirtió ayer domingo en el escenario de una de las manifestaciones más sentidas de devoción popular, con la tradicional procesión marinera en honor a la Virgen del Carmen, patrona del mar y de sus gentes.

Pasadas las siete de la tarde, desde el Paseo de Colón, tras los Xirimiters de la Marina, partía la Comisión de Fiestas del Carmen hacia la iglesia de Sant Jaume i Santa Anna para recoger la imagen de la Estrella de los Mares. La banda de la Unión Musical de Benidorm cerraba la comitiva.

Entre los asistentes, el alcalde de Benidorm, Toni Pérez; la concejala de Fiestas, Mariló Cebreros, otros miembros de la corporación municipal y el diputado autonómico Mario Villar. Por parte de la Comisión, el Patrón Mayor de la Cofradía de Pescadores, José Miguel Martínez, el presidente de la Comisión de Fiestas del Carmen, Ginés Alvarado y la Marinera de Honor 2025, Ariadna Orgilés.

Tampoco faltaron a la cita las reinas de las Festes Majors Patronals 2025, Aitana Pérez y Paula Pascual; la presidenta de la Comissió, Susana Martínez, y el presidente de la Asociació de Penyes Verge del Sofratge, Jonathan López.

Una vez en la iglesia, la imagen de la Virgen del Carmen cargada en andas por sus ‘mariners’, salía a recibir a la comitiva para realizar el recorrido en sentido contrario, hacia el puerto, donde sería, como manda la tradición, embarcada en una de las tres golondrinas que participaron en la procesión.

A la flota de barcos engalanados, se unieron decenas de embarcaciones para recorrer la bahía en una emotiva travesía que alcanzó su momento álgido y más solemne en la ofrenda floral en la mar, en memoria de los hombres y mujeres que han perdido la vida en él. Para garantizar la seguridad del acto, la procesión fue seguida en todo momento por la lancha de la Unidad de Playas de la Policía Local y por socorristas de la empresa concesionaria de Playas.

Tras la ofrenda, las naves regresaron a puerto y la imagen de la Virgen del Carmen fue trasladada a la Cofradía de Pescadores donde, desde su balcón, Ariadna Orgilés recitó unos versos en honor a la Estrella de los Mares que, ya de noche, regresó a la iglesia, lo que puso el punto final a las celebraciones de 2025.