Más de dos millones de personas se conectarán cada año, según la previsión de la empresa Wiongo
Benidorm implanta la primera gran red ‘smart wifi’ en playas de la Península
Benidorm ha iniciado la implantación de la primera gran red ‘smart wifi’ en playas de la Península de la mano de la empresa Wiongo. De hecho, este servicio de wifi grauito ya está disponible en toda la extensión de la playa de Levante y en el Castillo, y antes del 20 de abril lo estará también en la de Poniente y en todo el casco antiguo, según han informado hoy el alcalde, Toni Pérez; Mauricios Socias, CEO y fundador de Wiongo; y Manuel Bas, Development Manager de la mercantil. En rueda de prensa se ha comprobado en tiempo real el funcionamiento de esta ‘smart wifi’, mostrándose los dispositivos disponibles en el ámbito de influencia y cuántos había conectados en ese preciso instante.
El alcalde ha destacado “el esfuerzo y el trabajo” hecho por el Ayuntamiento, Visit Benidorm y Wiongo en los últimos nueve meses para desarrollar este proyecto, que tiene una duración de cuatro años, que es “a coste cero para las arcas municipales y para la fundación” y que progresivamente se extenderá a otros puntos de la ciudad.
Pérez ha incidido en que esta red de ‘smart wifi’ supone “un paso muy importante en la transformación digital” hacia la que camina el turismo y “en la que Benidorm quiere ser líder convirtiéndose en el primer Destino Turístico Inteligente”. Asimismo ha recordado que la ciudad ya había testado proyectos piloto para llevar wifi a puntos concretos de la playa de Levante y el Castillo. Tras esa experiencia “nos fijamos en los mejores y en qué estaban haciendo otros destinos que en esos momentos estaban por delante nuestra” en este ámbito, y se optó por contactar con la empresa que se ha encargado de la red de ‘smart wifi’ de la isla de Mallorca.
Esta red wifi está compuesta de 30 puntos de conexión instalados en el mobiliario urbano y es capaz de dar servicio de forma simultánea “a 20.000 usuarios concurrentes”. Desde Wiongo se estima que “no bajaremos de los dos millones de usuarios al año” ya que “hablamos de un destino turístico muy potente”.
Las sesiones tienen una duración de 30 minutos “por seguridad” y “para evitar abusos por parte de automatismos”. Pasado este tiempo, los usuarios pueden volver a conectarse a la red. Una conexión que se hace “sin barreras” y “con datos anónimos agregados”, según ha indicado Bas. Estos datos se complementan posteriormente con los que proporcionan herramientas como Google Analytics y que permiten trazar el perfil de los usuarios.
A partir de todos esos datos, que serán tratados por Visit Benidorm, se podrán “planificar estrategias turísticas y de gestión en ámbitos como la seguridad o la movilidad”, puesto que el mapa de conectividades permitirá conocer el flujo y concentración de personas en diferentes puntos de la ciudad y también sus gustos y preferencias.
Socias ha destacado que esta red opera con “un ‘hardware’ de calidad”, ya que asegurado que “el equipamiento” que se ha implantado en Benidorm “es el mejor que se puede instalar” y ha sido testado en los campus de Google.