Ayuntamiento, sector y Foreing Office coinciden en luchar contra las falsas reclamaciones de turistas británicos
El Ayuntamiento de Benidorm, el sector hotelero local y el cuerpo consular del Reino Unido han coincidido hoy en su interés por luchar contra las falsas reclamaciones presentadas por turistas británicos contra establecimientos de la ciudad. Unas reclamaciones fraudulentas que todo apunta a que estarían alentadas por despachos de abogados británicos que han encontrado en esta práctica una veta para hacer negocio, y al que ya han empezado a plantar cara los hoteleros, las agencias de viajes y turoperadores del Reino Unido.
Para abordar este asunto y plantear posibles soluciones, este mañana se han reunido en el Ayuntamiento el alcalde de Benidorm, Toni Pérez; la cónsul británica, Sarah-Jane Morris; el presidente de la patronal hotelera Hosbec, Toni Mayor; la secretario general de esta asociación, Nuria Montes; la gerente de la Fundación Visit Benidorm, Leire Bilbao; el concejal de Seguridad Ciudadana, Lorenzo Martínez; el comisario del Cuerpo Nacional de Policía, Juan Carlos Hernández; y el intendente jefe de la Policía Local, Juan Fuertes, entre otros.
Durante el encuentro ha quedado patente que el Foreing Office –el Ministerio de Asuntos Exteriores del que depende el cuerpo diplomático- está muy motivado e implicado en la lucha contra estas reclamaciones, al entender que toda la polémica que se ha suscitado en torno a esta mala praxis está dañando la imagen del pueblo británico.
De hecho, y según se ha trasladado durante la reunión, el Foreing Office ha elevado una petición al Ministerio de Justicia de su país para que de forma urgente adopte medidas que impidan esta actuación fraudulenta. Además, desde el Ministerio de Asuntos Exteriores británico se va a analizar la posibilidad de alertar de este posible fraude masivo en las campañas de Turismo Seguro que se realizan anualmente, haciendo especial hincapié en los aeropuertos con un tráfico importante de turistas procedentes del Reino Unido, como es el caso del de Alicante-Elche.